Olimpiadicidio

Había comenzado a escribir un resumen de la obra que varios humoristas cubanos están presentando en el teatro Karl Marx, y que anoche fui a ver, pero se me ha ido la musa humorística o la otra que a veces le acompaña, aquella que presume de comentarista de las páginas culturales de Granma o JR, así que se salvaron de una nota con aspiraciones de algo serio… Creánme, no se perderán mucho entre una nota más seria y esta que trataré de armarlas muy rápidamente. ;-)

El espectáculo se llama "Olimpiadicidio" y es una secuela de la serie televisiva “Jura decir la verdad”, la cual estuvo en antena por dos temporadas y que ahora está de receso. El show tiene algunos chistes graciosos y disparan fuerte sobre algunos temas como los deportistas que se quedan afuera, alguna velada referencia a las reflexiones de “quien Uds. saben”, bromas a costa de “Gustavito” (basadas en su veta gay o en aquello de que todos sus antiguos colegas en “Sabadazo”, Carlos Otero y Boncó a la cabeza, lo están llamando desde “el más allá”) y mucha crítica a la cotidianidad del cubano: las guaguas, la dieta promedio, lo que “te toca” en la bodega, la doble moral de los jefes… por cierto, entre esas críticas y menciones a temas prohibidos en Cuba, metieron un buen chiste a costa del problema que se busca cualquier cubano si detectan que tiene acceso a Internet.

En resumen, sonreí algunas veces durante el show pero, a pesar de la participación de varios de los más conocidos actores cubanos en apoyo al elenco tradicional de ese programa, no me pareció tan bueno el espectáculo como otros que han representado en el mismo escenario recientemente, como el de Pánfilo y del otro viejo, del cual todo el mundo salió comentando acerca del buen y fino humor que desplegaron…

Nota del fotoreportero de este blog: el asiento que conseguí ayer era en “el gallinero” (1er. Balcón, pa’trás), por lo que ninguna foto de las que tomé en el teatro sirvió para nada, así que se salvaron de ver al flaco Toirac en la imagen asociada al tema, y les pongo una cuyo único vínculo al tema de este post es porque la tomé justo cuando iba endirección al teatro por el Malecón habanero... Disculpen, pero prefiero "cienes y cienes de veces" ver una puesta del sol en el Malecón que la "pretty" cara de Chibichana… ;-)))