domingo, agosto 17, 2008

"El" viaje vacacional 2008...

Este año me propuse prepararle algo diferente a mis hijos en sus vacaciones y por eso, aproveché esta semana para irnos todos al centro de la Isla. La idea era llevarles a que conocieran la ciudad de Santa Clara, Trinidad, Cienfuegos, Playa Girón y, finalmente, Guamá. Lo pudimos hacer en ese mismo orden, aunque no sin los sustos normales para este tipo de aventuras en la Cuba actual y con muy limitado presupuesto... Para evitar cansarles, dividiré esta crónica en varios posts, de manera que esto tenga cierta coherencia y organicidad.

Esta fué la zona de visita:


De antemano me disculpo con Uds. porque la parque gráfica tendrá sus baches a partir de Santa Clara pues llegando a la ciudad de Trinidad mi cámara decidió no funcionar más y me dejó embullado y sin posibilidad de cumplir sus funciones en el viaje (mi móvil es sencillito o, como dicen los "gaitos", "de gama baja", o sea, sin cámara incorporada que me hubiera salvado ante este problema técnico).

Tomamos la autopista temprano, a las 0730 am del 13 de agosto, directo a la ciudad de Santa Clara, para garantizar llegar a una hora en que estuviera abierto el Mausoleo-monumento al Ché. Y esa fué nuestra primera visita concreta. El Mausoleo y el complejo de homenaje al Guerrillero Heróico, que incluye la plaza, es muy bonito y tranquilo. Allí no dejan acercarse con cámaras a las puertas del mausoleo-museo, así que todas las fotos tomadas son de los exteriores. Les adjunto algunas debajo. El acceso al museo-mausoleo es gratuito para todos, nacionales y extranjeros, lo cual es excepcional. Se comienza con un recorrido por el museo, interesante pero nada excepcional, que muestra fotos y objetos usados por el o por compañeros suyos en las distintas etapas de su vida: infancia, estudios de medicina, viajes por latinoamérica, Guatemala, México, Sierra Maestra, primeros años de la revolución como Presidente del Banco Nacional o Ministro de Industria o de sus etapas en las guerrillas en África y en Bolivia. Sólo después, las azafatas te dejan entrar al local donde están los restos de los compañeros de la guerrilla del Ché en Bolivia... es un local bajo, con piso y paredes de marmol y maderas preciosas, con ambiente más bien frío y humedad controlada, con vegetación viva, verde, dentro, que se renueva a cada rato para trasmitir la impresión de que es una gruta en medio de la selva boliviana, solemne, con una llama eterna en un extremo... Es impresionante estar allí, frente al nicho donde están sus restos mortales, al menos para una persona que, como yo, admira y respeta profundamente al Ché y lo que significa, mucho más allá de la foto de Korda en camisetas y tatuajes. Voy a pedirle prestado a Galeano su excelente definición de quien era el Ché: "cometió un pecado imperdonable: hizo lo que dijo, y dijo lo que pensó".

Después de esa visita obligada, llevé a mi tropa a conocer el centro de la ciudad: el parque Vidal, el hotel Santa Clara Libre, la Biblioteca Prov. Rubén Martínez Villena, a comer algo en alguna cafetería cercana _fíjense en "el carrito del helado" en pleno parque_ y posteriormente a visitar el monumento al descarrilamiento del Tren Blindado... ¿recuerdan aquella canción del Silvio sobre este monumento?... "En la ciudad que posee la isla en el centro/ hay un tren descarrilado (museo nacional)/ que los amantes fecundan con sabia del cuerpo./ ¡Viva ese hierro vencido por la claridad!/ ¡Viva ese lecho de amor!"... ya no creo que muchos amantes puedan aprovechar el lugar porque han instalado hasta SEPSAs de guardia)... Está muy bonito y conservado el complejo escultórico y el museo que está en ese lugar ahora.

Una vez cumplidas esas visitas, enseguida tomamos rumbo al Escambray _una observación, que mi hijo no dejó en todo el camino de precisarme que en realidad se llama "macizo montañoso Guamuaya"... ;-_, vía Manicaragua-Topes de Collantes, pero si hay un aspecto que hace insufribles las carreteras cubanas es la falta de señalización... entré por la carretera que no debía y sí, atravesé el Escambray, pero en vez de ir hacia Topes de Collantes me fuí por los pedraplenes más difíciles de transitar que Uds. puedan imaginar y salí a Manacas-Iznaga, cerca de la carretera que enlaza las ciudades de Sancti Spíritus y Trinidad... por cierto, el camino es pésimo pero debo reconocer que tiene unos paisajes montañosos espectaculares. Volviendo al tema, ya que llegamos allí de pua casualidad, entramos en la antigua finca de la Familia Iznaga, posiblemente la más renombrada y trascendente de las familias criollas asentadas en la zona, y donde está uno de los símbolos más notorios del Valle de los Ingenios: la torre Iznaga. Elégante y hermosa, esa construcción data de 1816 y marca el predominio del eclecticismo en la arquitectura local, con una altura de 45 metros repartidos en siete pisos o niveles, como una atalaya desde la cual se divisaban las plantaciones de caña de azúcar en la zona. Aquí les adjunto algunas fotos tomadas desde el último nivel de la misma.

Finalmente, y ya lo último antes de llegar a Trinidad por esa carretera, entramos al Mirador del Valle de los Ingenios, en la cima de una colina y con una vista lindisima de todo el valle, lugar donde en los siglos XVIII y XIX se concentraba la mayor concentración de ingenios y elegantes haciendas que daban renombre a la ciudad, demostrando el podería económico de sus propietarios.

Por cierto, justo en este lugar pude tomar las últimas fotos del viaje, así que esta entrega por capítulos continuará con fotos bajadas de Internet... Sorry!... :-(
























2 comentarios:

A Cuban In London dijo...

Excelente cronica, sen-or mio, y por supuesto que cuando los peques le descargan a la geografia, ya las cordilelras no se llaman cordilleras sino macizos.

Saludos desde Londres.

El isleño dijo...

Hi, Cuban... así mismo es!... ya el chama mío sabe mucho mas de geografía que yo, pero le falta práctica... :-)))

saludos desde otra isla, algo más al sur...