desde hace como un mes están dando una "novedosa" telenovela nacional, en el espacio correspondiente de la TV cubana... para definirla un poco mejor (porque los que puizá puedan leer este blog no deben ser justamente los que pueden ver la novela en mi Isla), es la mejor serie que ha abordado en los últimos 15 años (de antes me es imposible opinar) en su banda sonora las raices y amplitud de la musica cubana trovadoresca. ¿y a santo de qué se pone a opinar sobre telenovelas y bandas sonoras uno que casi está a punto de sentir fobia por la programación comñun de nuestras televisiones domésticas?...
Pues que ciertamente nos hace recordar que en Cuba no todo es salsa, timba o son, sinó que por muchos años (y ojalá muchos más) la música cubana se nutrió de músicos bohemios y trovadores de bar en bar para ir conformando una tradición musical exuberante y amplia que pervive, en una guitarra, hasta nuestros días.
Quizé me parcializo cuando tengo que opinar de un tipo fuera de liga como Silvio (Rodríguez) o Pablito (Milanés), pero sin duda que desde hace muchos años son los jóvenes quienes están reclamando su propio espacio y, además, lo hacen con una tímbrica añeja y actual, simultaneamente... en esa cuerda están cantautores como Santiaguito (Feliú, quien de veras está desaparecido), un Gerardo Alfonso (que a pesar de estar gestionando un proyecto cultural y ecológico no ha perdido sus deseos de cantarle a su ciudad) o un Carlos Varela... de todos ellos, me sigo dejando llevar por la poesía, por las letras, por la sencillez de las cuerdas que acompañan mayormente a Silvio y a Carlitos... también por su perenne capacidad para decir lo necesario (incluso lo que "disiente") sin aspavientos y sin otra fórmula que no sea movilizar millares de muchachos que cantan místicamente sus canciones bajo cualquier circunstancia.
Es algo bello ver a más de 8 o 10 mil personas (desde chicos de 14 años hasta abuelos prematuros y ortodoxos) cantando una canción acerca de un duende, de una era que pare un corazón, de una mujer con sombrero, de un Jalisco Park o sencillamente la osadía del hijo de Guillermo Tell cuando se cansó de ser quien sostuviera la manzana en su cabeza.
SI voy a terminar hablando de trova, trovadores y letras, creo que lo mejor es irme con estos versos de Silvio en "Resumen de Noticias" (LP o CD Al final de este viaje):
"He estado al alcance de todos los bolsillos
porque no cuesta nada mirarse para dentro.
He estado al alcance de todas las manos
que han querido tocar mi mano amigamente.
Pero pobre de mi, no he estado con los presos
de su propia cabeza acomodada
no he estado con los que rien con solo media risa
los delimitadores de las primaveras."...
martes, mayo 24, 2005
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